La Pizza casera, ¿quién se resiste a ella? Un pan redondo, aplastado, circular y cubierto de todos los ingredientes que podamos imaginar. La pizza, es conocida mundialmente pero como todos sabemos, es originaria de Nápoles.
Con los ingredientes adecuados, la Pizza casera se convierte en un alimento muy saludable, ya que la salsa de tomate es rica en licopenos (un potente antioxidante), además entre los ingredientes podemos añadir algunas verduras. Por otra parte, podemos decidir la cantidad de sal que añadimos a la hora de elaborarla.
Es una opción ideal para el fin de semana. ¡En casa nos encanta!
Ingredientes:
- 400 gramos de harina
- 200 gramos de agua
- 20 gramos de levadura fresca
- 1 cucharadita de sal
- 75 gramos de aceite de oliva virgen extra.
(Con estas cantidades os saldrán dos pizzas)
Empezaremos precalentando el horno a máxima potencia 250º.
Elaboración con Thermomix:
Echar en el vaso el agua, el aceite y la levadura. Programar 2 minutos 37º velocidad 2.
Después verter la harina y la sal. Programar 1 minuto, vaso cerrado, velocidad espiga.
Dejar tapado dentro del vaso durante algo más de media hora, para que leve.
Con las manos untadas de aceite sacar del vaso y sobre una superficie enharinada amasar ligeramente, dividir la masa en dos e ir formando la pizza dándole la forma redondeada y estirando con un rodillo o con las manos. Poner sobre un papel de horno.
Elaboración tradicional:
Templar el agua y diluir la levadura, añadir el aceite.
Agregar la harina y después la sal.
Con las manos untadas de aceite, amasaremos sobre una superficie enharinada, hasta que veamos que la masa tiene consistencia y se maneja bien. Formamos una bola, la metemos en un bol y la dejamos tapada algo más de media hora, en un lugar donde esté resguardada. Debe doblar su volumen.
Una vez haya pasado el tiempo de levado, volver a amasar ligeramente. A continuación dividir la masa en dos e ir formando la pizza dándole forma redondeada, estirando con un rodillo o con las manos. Poner sobre un papel de horno.
Ahora queda lo mejor, poner sobre la base de nuestra pizza casera los ingredientes que más nos gusten. Empezaremos con una capa de tomate frito, seguidamente los ingredientes que elijáis y por último una buena capa de queso rallado .
Yo he hecho una de verduras: cebolla, tomates cherry, espárragos, aceitunas negras y anchoas (mientras preparaba la masa he horneado unos minutos las verduras, para que suelten el agua y de paso queden más tiernas).
La otra pizza casera, la he hecho de bacón, huevo, anchoas y unas rodajas de queso fresco mozzarella.
Por último meter en el horno y bajar la potencia a 225º, hornear hasta que veáis que está dorada.
Diez minutos antes de sacarla del horno podéis aderezarla con orégano o hierbas provenzales.