El tomate está incluido dentro de la familia tanto de las frutas como de las hortalizas. Es una fuente de vitaminas y minerales para nuestra salud y nos proporciona un gran número de antioxidantes debido a los licopenos que contienen. Pero lo que muchos desconocen, es que la salsa de tomate frito es todavía más antioxidante, ya que los licopenos presentes en el tomate, al estar cocinados son asimilados más fácilmente por nuestro organismo.
Esta salsa de tomate debería ser uno de los imprescindibles en la nevera de cada casa, es muy fácil de preparar y puede servir como acompañamiento de multitud de recetas, tales como pasta, pizza, albóndigas o cualquier otro plato que se os ocurra.
Ingredientes:
- 800 grs. de tomate triturado (puede ser natural rallado o de bote)
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 80-100 grs. de aceite de oliva virgen extra (3 o 4 cucharadas aproximadamente)
- 1 cucharada de azúcar (para corregir la acidez)
- 1 cucharadita de sal
Elaboración con Thermomix:
Poner en el vaso el aceite, la cebolla troceada y el diente de ajo.
Triturar velocidad 4 durante 10 segundos.
Bajar los restos de las paredes con la espátula.
Programar 8 minutos, temperatura Varoma, velocidad cuchara. Colocar el cubilete en oblicuo en el bocal para que pueda salir la condensación.
Añadir el tomate, el azúcar y la sal.
Programamos 20 minutos, velocidad cuchara, temperatura Varoma. Colocar el cubilete bien para evitar salpicaduras.
Probar de sal antes de acabar el tiempo por si hubiera que rectificar.
Elaboración tradicional:
Picar la cebolla finamente y el diente de ajo.
Colocar una cazuela al fuego y echar el aceite, añadir la cebolla y el ajo picados. Sofreír a fuego medio-bajo durante 8 minutos aproximadamente.
A continuación agregar el tomate triturado, la cucharada de azúcar, la sal y remover.
Dejar a fuego medio-bajo durante 20 minutos aproximadamente.
Rectificar de sal si fuera preciso.
